La Biblia dice en Romanos 11:30-32
Pues como vosotros también en otro tiempo erais desobedientes a Dios, pero ahora habéis alcanzado misericordia por la desobediencia de ellos, 31 así también estos ahora han sido desobedientes, para que por la misericordia concedida a vosotros, ellos también alcancen misericordia.32 Porque Dios sujetó a todos en desobediencia, para tener misericordia de todos.
Introducción
Dios se muestra bondadoso y severo con Israel porque tiene misericordia de un pueblo obstinado, rebelde y desobediente, pero acusar o resaltar en los judíos esta lamentable condición no es de ningún modo justo ni adecuado porque los gentiles que ahora gozamos de su bondad, antes éramos desobedientes, pero hemos alcanzado misericordia.
Ese es el tema que el apóstol desarrolla en estos tres versos en su carta a los Romanos. En realidad la raza humana independientemente de su origen o raza resiste a Dios, se niega aceptar su señorío y rechaza someterse a sus designios, pero Dios muestra a todos ellos su compasión y misericordia sean judíos y gentiles.
Pablo señala con toda seguridad que frente al Señor tanto los judíos como los gentiles se han rebelado, pero tanto con unos como con otros, el Creador ha mostrado su compasión y los ha llamado a salvación, porque su amor y piedad es más grande que su ira y su fastidio ante la pecaminosidad de ambos.
Son dos temas los que Pablo desarrollará en estos versos. El primero será la desobediencia tanto de judíos como de gentiles y el segundo la misericordia del Señor para con los hebreos como para con los paganos. Todos han desobedecido y de todos Dios ha tenido compasión, eso no quiere decir que para conocer el amor del Señor habremos de vivir en pecado.
Pablo nos quiere llevar a considerar nuestra triste y lamentable condición de donde Dios nos sacó a nosotros los gentiles para que de esa manera valoremos y agradezcamos la infinita piedad de nuestro buen Dios que ante puso su amor para llamarnos a formar su pueblo.
El apóstol nos lleva a ponderar la grandeza del amor de Cristo sobre nuestras vidas para dar su vida por nosotros, aunque ello implicara que su pueblo cayera en desobediencia, sin embargo esa desobediencia tiene fecha de caducidad y en el porvenir todo cambiará para bien de Israel y la propia iglesia.
Israel: La bondad y severidad de Dios
La compasión divina ante la desobediencia
A. A los gentiles
Que eran desobedientes
Que han alcanzado misericordia
B. A los judíos
Que son desobedientes
Que alcanzarán misericordia
Antes de comenzar nuestro estudio debemos aclarar que Dios se desagrada de la desobediencia. De ningún modo puede aceptar esa conducta de quienes le conocen y aún de sus criaturas. La rebeldía siempre tiene su castigo y en el caso de Israel es más que claro que han pagado muy caro su osadía de alejarse de su Señor.
Ejemplos en la Escritura de esta verdad hay muchos. Adán, pecó junto con Eva. Se rebeló, desobedeció, se opuso a la voluntad de Dios y si bien Dios lo perdonó y tuvo misericordia de él, murió físicamente, aún cuando no era ese el plan del Creador para su vida. David, pecó con Betsabé. Dios lo perdonó, pero tuvo que pagar los efectos de su rebelión.
Esaú vendió su primogenitura que nunca pudo recuperar, Dios lo perdonó, pero ya no pudo convertirse en el patriarca de Israel que sí fue su hermano Jacob, llamado posteriormente Israel. Y así muchos ejemplos de las consecuencias de la desobediencia de muchos personajes de la Escritura.
A. A los gentiles
El verso treinta de nuestro estudio dice de la siguiente manera: 30 Pues como vosotros también en otro tiempo erais desobedientes a Dios, pero ahora habéis alcanzado misericordia por la desobediencia de ellos.
Pablo define de la siguiente manera la condición de los gentiles en la carta a los Efesios capítulo 2:11-12.
Así pues, ustedes, que no son judíos, y a quienes llaman “no circuncidados” los judíos (que circuncidan al hombre en el cuerpo, y a sí mismos se llaman “circuncidados”),12 recuerden que en otro tiempo estaban sin Cristo, separados de la nación de Israel, y no tenían parte en las alianzas ni en la promesa de Dios. Vivían en este mundo, sin Dios y sin esperanza.
En Colosenses 1:1-23 Pablo reitera la condición de los gentiles ante el Señor
Ustedes antes eran extranjeros y enemigos de Dios en sus corazones, por las cosas malas que hacían, 22 pero ahora Cristo los ha reconciliado mediante la muerte que sufrió en su existencia terrena. Y lo hizo para tenerlos a ustedes en su presencia, santos, sin mancha y sin culpa. 23 Pero para esto deben permanecer firmemente basados en la fe, sin apartarse de la esperanza que tienen por el mensaje del evangelio que oyeron. Éste es el mensaje que se ha anunciado en todas partes del mundo, y que yo, Pablo, ayudo a predicar.
- Que eran desobedientes
La frase “sin Dios” que escribe Pablo en el verso doce del capítulo dos de la carta a los Efesisos, en griego se escribe “a theos” que en nuestro español se escribe y lee como ateos. Los gentiles éramos ateos porque vivíamos sin Dios. Era una vida a espaldas del Creador, lo que nos llevaba a vivir desobedeciendo sus mandamientos.
Eramos desobedientes porque no conocíamos a Dios, porque vivíamos completamente separados de su gracia.
- Que han alcanzado misericordia
Gracias a la desobediencia de los judíos nosotros alcanzamos misericordia, según podemos leer en Efesios 2: 1-10 que dice de la siguiente forma:
Antes ustedes estaban muertos a causa de las maldades y pecados 2 en que vivían, pues seguían los criterios de este mundo y hacían la voluntad de aquel espíritu que domina en el aire y que anima a los que desobedecen a Dios. 3 De esa manera vivíamos también todos nosotros en otro tiempo, siguiendo nuestros malos deseos y cumpliendo los caprichos de nuestra naturaleza pecadora y de nuestros pensamientos. A causa de eso, merecíamos con toda razón el terrible castigo de Dios, igual que los demás. 4 Pero Dios es tan misericordioso y nos amó con un amor tan grande, 5 que nos dio vida juntamente con Cristo cuando todavía estábamos muertos a causa de nuestros pecados. Por la bondad de Dios han recibido ustedes la salvación. 6 Y en unión con Cristo Jesús nos resucitó, y nos hizo sentar con él en el cielo. 7 Hizo esto para demostrar en los tiempos futuros su generosidad y su bondad para con nosotros en Cristo Jesús. 8 Pues por la bondad de Dios han recibido ustedes la salvación por medio de la fe. No es esto algo que ustedes mismos hayan conseguido, sino que es un don de Dios. 9 No es el resultado de las propias acciones, de modo que nadie puede gloriarse de nada; 10 pues es Dios quien nos ha hecho; él nos ha creado en Cristo Jesús para que hagamos buenas obras, siguiendo el camino que él nos había preparado de antemano.
B. A los judíos
El verso treinta y uno de nuestro estudio dice de la siguiente forma: 31 así también estos ahora han sido desobedientes, para que por la misericordia concedida a vosotros, ellos también alcancen misericordia.
Debido a Cristo los judíos se obstinaron ante Dios. Lo rechazaron porque no pudieron comprender que su Mesías primero vino a salvarlos de sus pecados. Ellos querían un Ungido que los libertara del yugo romano, pero al comprender que eso no sucedería con Jesús lo enviaron a la cruz.
- Que son desobedientes
Sin embargo, en descargo de ellos podemos decir que los judíos son desobedientes para que los gentiles pudieran alcanzar la salvación. Todo un misterio para nosotros porque Dios los llevó a esa condición para permitir el ingreso como pueblo de Dios a los gentiles que eran en otro tiempo enemigos de Dios.
- Que alcanzarán misericordia
Pero Pablo señala con toda claridad que ellos no perderán su condición de pueblo escogido de Dios. El apóstol no desliza la idea de que Israel ha quedado desechado. Nunca. Lo que hace es decir que al final, Dios también tendrá compasión de ellos, como ahora tiene compasión de los gentiles.
El verso treinta y dos resume esta verdad de la siguiente forma: “Porque Dios sujetó a todos en desobediencia, para tener misericordia de todos.”
¿Qué quiso decir Pablo con esta frase? La palabra “sujetó” en griego nos ayudará a entenderlo. La expresión procede de la raíz “sugkleió”. Esta palabra se utiliza en Lucas 5: 6 que dice “Y habiéndolo hecho, encerraron gran cantidad de peces, y su red se rompía.” Se trata de que los hombre quedaron encerrados o atrapados como los peces en la desobediencia y de allí Dios nos tomó.
Los gentiles desobedecieron y Dios aplicó su misericordia, lo mismo hará con los judíos, aplicará su misericordia con ellos.