La Biblia dice en 2ª Pedro 2:17-19
Estos son fuentes sin agua, y nubes empujadas por la tormenta; para los cuales la más densa oscuridad está reservad para siempre. 18 Pues hablando palabras infladas y vanas, seducen con concupiscencias de la carne y disoluciones a los que verdaderamente habían huido de los que viven en error. 19 Les prometen libertad, y son ellos mismos esclavos de corrupción. Porque el que es vencido por alguno es hecho esclavo del que lo venció.
Introducción
Pedro presenta a los seudo maestros desde sus diferentes ángulos y perspectivas, no quiere dejar ningún punto sin examinarlo y presentarlo para que la iglesia esté prevenida y consciente de la clase de personas que encarnan estos enemigos y adversarios de la iglesia, puestos por el maligno para confundir y estorbar el crecimiento del evangelio.
Y ahora pasa a mirar su vacuidad, es decir, el gran vacío que tienen en sus vidas. Los falsos maestros no tienen fondo, no hay profundidad de ninguna clase en sus enseñanzas porque son personas muy, pero muy, superficiales, de hecho no tienen nada que ofrecer de sólidez en sus enseñanzas y por eso recurren a palabras infladas.
Para expresar esta verdad, Pedro recurre a dos figuras poéticas. La primera es una fuente sin agua. Algunas versiones traducen como pozo sin agua, para resaltar que los falsos maestros carecen de algo que puedan ofrecer a las personas que los escuchan, en realidad no tiene nada que dar.
La segunda figura retórica es nubes empujadas por la tormenta. Algunas versiones optan por verter como bruma empujada por el viento y otras neblina arrastrada por el aire, lo que nos ayuda a entender que no hay ninguna clase de fuerza o fortaleza en las enseñanzas de estos personajes émulos de Balaam.
Estas dos condiciones de los falsos maestros son rematadas con la afirmación: para los cuales la más densa oscuridad está reservada para siempre. Lo vano de los falsos maestros va a ser castigada con una densa oscuridad como la que hemos podido conocer luego del accidente en el Oceáno Atlántico con el tour de la capsula de pasajeros llamado Titán.
La condenación eterna es ilustrada de esta manera para conocer perfectamente el destino de quienes por ambición, avaricia y deseos mal encausados se entrega al engaño usando la perfecta revelación divina.
No se sorprendan: Los cristianos también se equivocan
Porque siguen hombres vacíos
A. Vacíos, pero llenos de mentiras
B. Vacíos, pero llenos de maldad
Los falsos maestros mienten y engañan, tal y como lo hizo la serpiente en el huerto del Edén con Eva porque sus enseñanzas están más enfocadas en los placeres que en el intelecto y corazón de las personas y por eso en lugar de libertar a quienes los oyen los vuelven todavía más esclavos de lo que ya eran.
Ese es el grave problema de este tipo de personas porque su enseñanza, si se le puede llamar así, no tiene interés en volver a sus seguidores en hombres y mujeres piadosas, sino en obtener de ellos ganancias.
A. Vacíos, pero llenos de mentiras
El verso dieciocho de nuestro estudio dice de la siguiente manera:
Pues hablando palabras infladas y vanas, seducen con concupiscencias de la carne y disoluciones a los que verdaderamente habían huido de los que viven en error.
Los falsos maestros tienen un foco de atención o una clase de personas las que están dirigidas a quienes de manera honesta e íntegra tratan de luchar contra el pecado. No es casual, para que dirigir su atención a quienes no han cambiado su estilo de vida, es más a ellos no les interesa porque ya viven lo que los falsos maestros les ofrecen.
Antes de ocuparnos del grupo de personas que buscan, Pedro nos ofrece la manera en la que logran sus malvados propósitos: seducen, engañan, mienten y falsean a través de palabras infladas y vanas a quienes los oyen. Esta última frase nos ayuda a descubrir a un falso maestro.
No tiene contenido, no tiene nada espiritual, todo lo que proclama no solo es vano, sino que lo hacen con soberbia. La expresión infladas que usa el apóstol procede de la raíz griega “uperogkos” que literalmente se traduce abultados y por eso algunos textos lo vierten como insolentes o arrogantes. Las palabras de los falsos maestros tienen como característica principal altivez o superioridad.
Además sus palabras son vanas, es decir sin sentido, ineficacias y vacías. La palabra griega mataiotes que se usa en el original para esta expresión denota la idea inestable y frágil que no lleva a ningún lugar o que no tiene propósito alguno. Según Pedro esto lo hacen con quienes verdaderamente habían huido de los que viven en error.
La palabra error procede del griego “plané” que literalmente significa desvidados o engañados. Los que falsos maestros buscan a los genuinos arrepentidos.
B. Vacíos pero llenos de maldad
El verso diecinueve dice así:
Les prometen libertad, y son ellos mismos esclavos de corrupción. Porque el que es vencido por alguno es hecho esclavo del que lo venció.
Los falsos maestros son especialistas en prometer lo que no pueden cumplir. Pedro dice que una de sus banderas es hacerle creer a quienes les oyen que los liberarán de la pobreza, los liberarán de toda clase de opresión, pero en realidad es una mentira llena de maldad porque ellos no pueden dar lo que no tienen.
Esclavos de corrupción es la nueva afirmación de Pedro sobre esos seudo enseñadores que en esa condición, atados a la maldad le hacen creer a la gente que podrán hacer algo por ellos, cuando en realidad no pueden hacer nada.